Descripción enviada por el equipo del proyecto. El Zoetrope es el nuevo cine de Blaye. Incluye dos salas de 280 y 120 plazas, así como una cafetería abierta en la calle principal de la ciudad. El cine pertenece a las autoridades municipales.
Visible en el estilo del cine de los años 1930 y 1950, cuando esos lugares eran un lugar de vida y no de mero consumismo, su programa refleja una ambición pública: ofrecer un espacio acogedor y confortable, donde la gente puede pasar un buen rato antes y después de la película.
Para existir en la ciudad, este cine debe ser reconocible, su arquitectura debe ser singular. No quiere mezclarse, desea el diálogo con la ciudad, para iniciar una escena cultural viva y periódica. Este proyecto es un homenaje a la historia del cine, a sus debuts mecánicos, un guiño a la ciudadela al pie de la cual se instala.
Este proyecto se basa en una analogía con la Zoetrope, una máquina desarrollada en el siglo 19 por William Horner, que consiste en un cilindro portador de imagen que gira sobre un eje. La geometría del vestíbulo se construye a partir de esta figura. El nombre es también un homenaje a Francis Ford Coppola y su compañía de producción, American Zoetrope.
Amable y familiar, es un espacio que la gente de Blaye puede hacer propio, como lo hacemos cuando ciertos lugares se convierten en parte de nuestra familia.
El cilindro, recordando el de la Zoetrope, es el espacio de recepción del cine; se vuelca a una galería que conduce a las salas de proyección. Está construido de metal y
Las salas de proyección están cubiertas por placas micro-perforadas de metal. Las imágenes que representan son de «Hombre subiendo escalera» de Earwards Muybridge.